Pues bien, luego de tantos slogans  a lo largo de las décadas, se podría decir que  si en algo Utilísima muestra continuidad es  con la palabra "vida". Con ellos es:  más simple, la  vivimos  o la cambiamos. Es penoso que la persistencia no vaya más allá que eso.

Existen personas que aseguran que, de no ser por  los protagonistas con sus acentos regionales  o modismos propios,  no es fácil diferenciar los  programas de ambas versiones del canal, dada la análoga estructura de los mismos. Se ha equilibrado la balanza, pero nivelándose en la forma menos cautivante. Se aferran a la cocina como centro de interés. ¿Escaseara  ingenio para ofrecernos más diversidad de temas, recursos para más capítulos o faltará  imaginación ? ¿Con qué finalidad quieren demostrar que poseemos un elemental y rústico intelecto cuando saben que no es así?

 La mayoría de nuestros compatriotas deben seguir un irrelevante libreto  que les es impuesto desde más allá de nuestras fronteras,  mucho más allá. De varias formas, los van encuadrando de a poco en el formato norte, buscando interferir la personalidad característica de esta parte del continente. Los vemos reprimidos en sus ganas de andar el camino muy bien trazado hace tantísimos años, donde  el profesional actuaba con soltura, transmitiendo su idea sin presiones ni imposiciones,  con nuestros hábitos y estilos.

Ante una nueva propuesta nacional, ya ni siquiera esperamos  similitud con la identidad de hace años; nos conformamos con que  nos defraude lo menos posible.

Sea como sea, es preferible el canal totalmente argentino en Directv. Usando  nuestros propios giros idiomáticos, sabores y demás componentes que nos identifican; pero para ello ¿deberemos tolerar un esquema reformado y farandulero, con influencias de inaprovechables pasatiempos de otras regiones de nuestro continente?